ORACIÓN
¡Oh Santísima
anima, en cuyo tránsito feliz los ciudadanos del cielo
salen al encuentro! El coro de los ángeles se alegra y
la Trinidad Santísima te convida, diciendo con amorosas
palabras: "Permanece, Pedro, y esta con nosotros para siempre"
V. Ruega por nosotros, Pedro dichoso.
R. Para que seamos dignos de las promesas
de Jesucristo.
Oración. ¡Oh Dios
y Señor mío! que te dignaste ilustrar al bienaventurado
San Pedro de Alcántara, tu confesor, con el don de una
penitencia admirable y de una contemplación altísima,
concédenos piadosísimo que ayudados de sus méritos,
merezcamos, mortificados en la carne, ser participantes de los
dones celestiales. Por Nuestro Señor Jesucristo, Hijo
tuyo, que con el Padre y el Espíritu Santo vive y reina
por los siglos de los siglos. Amén. |